En estos días hemos visto como el Atlantis reparaba al Hubble en lo que ha sido la más larga y complicada tarea que ha llevado a cabo un transbordador, en un campo (la reparación de telescopios) para el cual no ha sido diseñado (recordemos que transbordador vale para satélites y para ISS). Y todo esto ha sido por algo. Resulta que la ESA (si esa agencia que, a mí, me recuerda a la TIA de Mortadelo y Filemón) ha puesto en órbita, no uno, sino dos, telescopios espaciales muuucho más avanzados que el Hubble (unas 400 veces mejor) y eso va a hacer mucha pupa en los proyectos de estudio del cosmos que la NASA tenía contratados con Universidades y grupos de investigación de medio mundo. Ahora tienen competencia y, eso, ha hecho que tuvieran que arriesgar de más en una misión, larga y no exenta de peligros.
Desde que Bush (Jr) decidiera que el Hubble era un trasto viejo y que no merecía la pena repararlo, mucho han cambiado las cosas (sí, para Bush también) pero el caso es que Mr Obama ha decidido que no y que el nuevo director de la NASA sea alguién con otro tipo de miras.
Duro trabajo le queda a los americanos si en 2011 quieren jubilar los transbordadores por el nuevo OSP. Con todo el mundo a la carrera de poner trastos en órbita: rusos, chinos europeos, indios... vamos va a estar el parking de ahí arriba un poco complicado de más.
Desde que Bush (Jr) decidiera que el Hubble era un trasto viejo y que no merecía la pena repararlo, mucho han cambiado las cosas (sí, para Bush también) pero el caso es que Mr Obama ha decidido que no y que el nuevo director de la NASA sea alguién con otro tipo de miras.
Duro trabajo le queda a los americanos si en 2011 quieren jubilar los transbordadores por el nuevo OSP. Con todo el mundo a la carrera de poner trastos en órbita: rusos, chinos europeos, indios... vamos va a estar el parking de ahí arriba un poco complicado de más.
