Bronislaw Komorowski es, desde el día 4, el presidente electo de Polonia. Y no es esta una cuestión baladí. Rememoremos. Polonia, un país de la órbita Ex-URSS que se convulsionó con una revuelta obrera con un sindicato de trabajadores que llevó al mitico Lech Walessa a desbancar a base de bien al gobierno estalinista. Toda esta fase trajo consigo libertades en forma de libertad capitalista, el sindicato Solidarnosc, con el apoyo de Vaticano y las potencias Occidentales, lograban su objetivo y en 2004 Polonia ingresaba en la UE. Como resultado de todo este proceso tuvo lugar una potente reforma industrial sobre todo, en el sector MineroMetalúrgico, principal segmento de producción polaco.
Pero, en los últimos años, un par de gemelos llegaron al poder, los hermanos Kaczynskiy, jugaban al papel de "poli bueno, poli malo" tirando de la cuerda hacia un ultranacionalismo polaco. Este juego disgusta tanto a la UE como a Rusia que no ven con buenos ojos estos escarceos. Pero la situación cambia con la muerte de uno de ellos en el accidente aéreo que se llevó por delante a toda la plana mayor polaca, momento en el que se convocan estas elecciones y el rumbo cambia de nuevo.
El nuevo gobierno, más cercano a Europa y con buenas relaciones con Rusia favorece a todo el mundo. Hay que ver lo que un fortuito accidente puede arreglar, ¿no?
Pero, en los últimos años, un par de gemelos llegaron al poder, los hermanos Kaczynskiy, jugaban al papel de "poli bueno, poli malo" tirando de la cuerda hacia un ultranacionalismo polaco. Este juego disgusta tanto a la UE como a Rusia que no ven con buenos ojos estos escarceos. Pero la situación cambia con la muerte de uno de ellos en el accidente aéreo que se llevó por delante a toda la plana mayor polaca, momento en el que se convocan estas elecciones y el rumbo cambia de nuevo.
El nuevo gobierno, más cercano a Europa y con buenas relaciones con Rusia favorece a todo el mundo. Hay que ver lo que un fortuito accidente puede arreglar, ¿no?
