lunes, junio 23, 2008

Hay para todos

En esto de las crisis lo bueno es que, cuando empieza uno, parece que todos se contagian. De esta guisa ha empezado el PP su congreso en Valencia para intentar resolver los problemas de casa antes que los de fuera. Como forma de empezar es buena, el caso es que nadie entiende qué es lo que han acordado. Hacia afuera dan la imagen de partido político que es autocrítico, diferencian entre derecha, ultraderecha y centro y parece que todo son rosas y que cada cual expone lo que piensa. Lo que a mí sigue sin quedarme nada claro es qué pasa realmente de puertas adentro. Todo este rollo del congreso del PP parece una maniobra de lavado de cara de un partido que no ha sido capaz de hacerse con unas generales, ni cuando el eterno rival afronta la peor crisis económica de los últimos 10 años. Parace que quieren desmarcarse del sector ultraderechista pero sin hacerlo. No sé. Esto es demasiado raro. Lo que sí está claro es que de cerrada esa crisis, al igual que la económica, nada de nada por ahora.