lunes, enero 10, 2011

El caso Giffords

Los EEUU nos tienen acostumbrados históricamente a dirimir sus problemas políticos a gatillo y plomo y, como era de esperar tras el enrarecimiento del clima político con los discursitos incendiarios de unos y otros, la cosa ha explotado. Tiroteo en Tucson, seis muertos y una senadora grave a más de una veintena de heridos de bala. ¿el culpable? ¡Ah sí! Un chiflado que al registrar su casa encontraron miles de documentos que decían a las claras lo chiflado que estaba, que odiaba a Giffords, y que tenia una Glock adquirida en un tienda con papeles y todo. Media docena de cámaras que lo captan todo y unos cómplices que, al final resultaron no serlo.
Pues nada, al final me tienen que tildar de paranoico y conspiranoico, pero es que parece que esta historia tiene todos los parecidos habituales con esas otras historias que tantas veces hemos visto en el cine y la TV. Desde el famoso Lee Harvey Oswald y JFK a las docenas de filmes con casos iguales. Y siempre el mismo cuento. Al final lo que tenemos es una senadora que molesta, menos y un Obama que sale reforzado y que vuelve al ring cuando lo tenia crudo. Dentro de un mes no lo recordará nadie y en un par de años otro episodio calcado.
Como último dato para el mega guión Hollywoodiense: está casada con un astronauta: Mark Kelly.