miércoles, septiembre 29, 2010

29-S

Pues sí. España ha padecido la huelga general más extraña, seguramente de su historia. Basta con decir que, a las 48 horas de haberse celebrado dicha huelga ni un solo medio nacional de prensa volvía a hablar sobre el tema.
La lluvia de críticas, desde todos los sectores y todas las ideologías contra una huelga que nadie entiende, ha colocado a los sindicatos de este país al borde del cuestionamiento.
¿Para qué hacer una huelga contra una ley de reforma laboral cuando dicha ley ha sido aprobada hace 3 meses? Esa es la gran pregunta a la que acompañan otras como, ¿y yo, trabajador de a pie, en qué me veo reflejado en los sindicatos actuales?¿Siguen teniendo sentido estas instituciones que se nutren del mismo gobierno al que critican? Yo solamente se una cosa: nadie muerde la mano que le da de comer.
Tal vez sea hora de replantearnos la representación de los trabajadores en el mundo. Se necesita una revolución laboral como la de la Edad Industrial en su momento.