Bien, como el que avisa no es traidor y nos llevan avisando seguido, aquí tenemos la prueba tangible de que algo gordo pasa en el mundo económico. Hoy me he levantado con la noticia de la grave crisis en el sector inmobiliario de EEUU que ha obligado a la inyección de emergencia de miles de millones de dólares en el mercado de Wall Street y a un más que previsible bajón en los tipos de interés (5.25% al 5%) aunque sea a costa de reducir beneficios que dan igual porque el barco se hunde.
Esto ha sido el viernes, como el fin de semana no juegan estos de la bolsa, para hoy se espera que el golpe llegue a las bolsas europeas. Se prevé que los bancos tengan pérdidas serias a no ser que algún tipo de medida extraordinaria palie los efectos. Pero da igual, será posponer lo inevitable, la economía camina hacia un nuevo crack y lo saben perfectamente.
Esto ha sido el viernes, como el fin de semana no juegan estos de la bolsa, para hoy se espera que el golpe llegue a las bolsas europeas. Se prevé que los bancos tengan pérdidas serias a no ser que algún tipo de medida extraordinaria palie los efectos. Pero da igual, será posponer lo inevitable, la economía camina hacia un nuevo crack y lo saben perfectamente.
